El atlántico en estado puro.

Hoy me ha llegado uno de esos correos reenviados, me ha llamado la atención y comparto con vosotros unas cuantas imágenes bonitas de nuestra costa.
Siento no poder poner el nombre del autor o autores de las fotos ya que lo desconozco. Pero sin lugar a dudas ha sido un gran cazador de olas.
Os dejo con el texto y las fotos que me ha enviado mi gran amigo Daniel López, gracias Hommer.

Seguro que habréis visto por las noticias que el temporal ha causado cuantiosos daños materiales y desgraciadamente también personales en la costa del norte de España, pero en esta ocasión queremos mostrar la parte más agradable de este fenómeno: su espectacular belleza.
El Atlántico en estado puro; es una pena que no pueda acompañar con estas fotografías de la costa de Ferrolterra el sobrecogedor sonido del mar rompiendo contra las rocas, o la sensación de "llover desde abajo" cuando te llega el vapor de agua escupido por las olas, pero al menos espero que estas imágenes os transmitan las emociones que se sienten al contemplar de cerca cuando la naturaleza muestra toda su fuerza.

Olas rompiendo junto al faro de A Frouxeira, Meirás.


Calculando con la referencia del hombre del acantilado, la espuma de las olas alcanzaba unos 50 metros de altura.


Capilla "Virxe do Porto", Meirás.


Acantilados de Pantín y Valdoviño.

Guardianes del paraiso.

Foto: Locales del paraiso.


El sábado 13 de noviembre nos pilló una tormenta fuerte, con una granizada durísima, muchos en el agua tuvimos que poner las tablas sobre la cabeza para protegernos de lo que dolía el granizo.

Foto:Uno de los rinconcitos donde más veces he visto el arco iris y olas only longboards.

Otro terror-tour.

Los mapas de olas llevaban varios días marcando que entraba algo gordo, normalmente a medida que se acerca el día señalado las predicciones van bajando de tamaño pero esta vez parecía que la cosa iba a ser potente.

A primera hora de la mañana arranqué a ver que era lo que me encontraba, de camino, la imagen de Pantín desde la carretera va a tardar en olvidárseme. Las Zapatillas no se veían entre un mar de espumas y las olas de la serie se comían los acantilados de Marnela y eso que la marea estaba casi baja de todo.

Era un día de viento fuerte del noroeste y trombas de agua constantes en los que te preguntas que haces a esas horas un día por semana, por una nacional con las tablas en el coche, pero cuando vi Villarrube y las series que entraban en el puerto de Cedeira se me pusieron los dientes largos.

Viendo como estaban las cosas seguí directo a mi destino, convencido y muy motivado con lo que veía al paso de cada curva.

Antes de llegar a Ortigueira noto como un disparo y cuando abro los ojos estoy lleno de miles de cristalitos pequeños y no tengo el parabrisas. Me paro a la orilla de la carretera y me doy cuenta de que llevaba la calefacción a tope y que seguramente por contraste de temperatura el cristal rebentó en mil pedazos.

Me pienso en unos segundos si llamar a la grua, si seguir o si dar media vuelta. En ese mismo momento deja de granizar.

Tenía que estar por la tarde en Ferrol sin falta, lo de la grua no me convencía y como en ese momento no llovía acelerador a fondo y media vuelta.

Tuve suerte que no me llovió y que la autoridad tampoco me pilló, a pesar de todo aunque iba conduciendo y descojonándome cuando me cruzaba con un camión iba bastante cagao.

Foto: Una llegada a casa celebrada.


Un saludo a todos esos surfistas con mentalidad que aquel día de perros pillasteis un buen baño y a los que me saludasteis o me hicisteis luces mientras os descojonabais.
En definitiva, no todas las escapadas salen bién, tenía que haber seguido, iba solo, el día era feo y me cagué.
Algunos le llamaron Becky, otros ciclogénesis, otros el gran martes y para mi ....otro Terra Tour- Terror Tour.

Echale un ojo.

Una nueva web de compra-venta de articulos relacionados con el surf ha salido a la luz, muchos de los vendedores se encuentran por esta zona, su nombre es Surfmarket.

Foto: Echale un ojo que no se pierde nada.

Vicio , vicio!!

La moda, la hipocresía y El Paño.

Mi abuela era una gran aficionada a la costura, muchas veces aprovechaba tozos de telas y solía confeccionar unas pequeñas bolsas que usaba para diferentes labores.

Uno de los diseños que más me gustaban era el de una bolsa alargada con un asa enorme que ella confeccionaba y usaba para llevar las barras de pan cuando iba a la compra ya que le permitía llevar la barra colgada y las manos libres.

Una tarde, dándole vueltas a la cabeza me di cuenta que una de esas bolsas era justo lo que necesitaba para acercarme a la playa en moto como hacíamos a diario.
Disponer de las manos libres era algo básico para acercarnos a la playa dos personas en una moto con dos mochilones y dos bodyboards.

Mi abuela tomó medidas para realizar una funda especial y a medida. Puso como única condición una cosa: "compra un paño de tela que sea fuerte".

La funda en un par de tardes fué terminada, cuando la estené obviamente no iba a la moda, para muchos aquello no era ni una funda, era una chapuza, una mierda y muchos de ellos si les pregunto a día de hoy me dirán que es una joya porque resulta que ahora a las chapuzas de antes se les llama "paños retro".



Tamega era un referente de aquella, recuerdo que vino de visita a Doniños y además de echar unas firmas se largó unos cuantos ARS en unas olas pequeñas y tocadas de viento que nos dejaron pasmados.
Hoy he visto otro video de él en el Frontón y viendo donde sube a hacer las maniobras no me extraña que con 14 años nos quedásemos pasmados.

Momentos: La hora de comer.

No recuerdo muy bien lo que es comer en casa con el telediario de las tres, ese que empieza por lo internacional, continúa con los deportes y termina con la previsión metereológica. Sigue siendo así, no???

El otro día me comentaba un amigo que le gustaba que la comida fuese un momento, un espacio de tiempo donde te sientas, te relajas y disfrutas charlando.




Yo he decido sacrificar ese momento, sobretodo durante el invierno. Antes la cocina era el lugar elegido y preferido para comer por ser la zona más soleada de la casa.

Hoy en día el bocadillo sustituye al plato y he cambiado la cocina por la recta de Doniños o las de la Carretera de Castro como lugares preferidos para comer en itínere sin preocuparte de que tienes que cambiar de marcha.